Al Derecho logró tomar unos minutos de la mujer más importante en el mundo jurídico colombiano actual. En esta opotunidad decidió hacerle una serie de preguntas sobre la crisis, el futuro de la corte y su papel en ella.
Por: Andrés Morales, af.morales1607@uniandes.edu.co y Francisco Gnecco, f.gnecco94@uniandes.edu.co, estudiantes de octavo semestre de Derecho.
Desde 2009 la jurista antioqueña se desempeña como magistrada de la Corte Constitucional. Electa como relevo del célebre Magistrado Manuel José Cepeda por el congreso de la república en terna del entonces presidente Álvaro Uribe Vélez, ha desempeñado su labor con excelencia y profesionalismo.
En la coyuntura problemática que envuelve a las cortes y en lo que los medios han llamado la peor crisis de la Corte Constitucional, le ha correspondido a la doctora Calle asumir la presidencia de la corporación.
Alderecho logró tomar unos minutos de la mujer más importante en el mundo jurídico de hoy. En esta oportunidad decidió hacerle una serie de preguntas sobre la crisis, el futuro de la Corte y su papel en ella.
Alderecho: Debido a la coyuntura que atañe la llamada crisis de la Corte Constitucional, le ha correspondido a usted asumir la presidencia de la corporación ¿qué retos enmarca esta figura en tiempos de crisis?
María Victoria Calle: No conocíamos situación igual en la Corte. Por tanto, no existe guía o manual que me indique el camino a seguir. Lo que sí se está haciendo es una serie de sesiones reflexivas con el objetivo de acercarnos al ciudadano y evitar que este le atribuya lo que está sucediendo a todos los Magistrados y a toda la Corte. Me parece importante que los ciudadanos diferencien ocho de uno. La situación de la Corte se limita a una persona que está siendo cuestionada.
AD: Antes se consideraba a la Corte Constitucional como un órgano incorruptible. Ante los sucesos recientes, ¿consideraría la posibilidad de revaluar el sistema de control de la Corte?
MVC: La Corte Constitucional es la Corte de cierre en Derechos Fundamentales. Por eso, sobre ese respecto no cabe ningún tipo de control de otra corporación. Podría hablarse también del control intraorgánico que hace un Magistrado sobre otro a la hora de decidir sobre una materia. Con respecto al control que ejerce la comisión de acusación encargada de investigar las conductas de los Magistrados, debe quedar claro que la Corte no ha cambiado su funcionamiento o el método de selección de tutelas, ha venido haciendo lo mismo desde hace 23 años por lo que un cambio en el sistema de control no tiene lugar. Los cambios deben ser reflexivos y no coyunturales.
Ahora bien, se está evaluando la posibilidad de hacer modificaciones al reglamento interno de la Corte que pueda darle más transparencia a la tarea que hacemos. Pero de ninguna manera va a haber un cambio en la manera de proceder de la Corte.
AD: Los medios han calificado esta como la peor crisis que ha enfrentado la Corte Constitucional. ¿Está usted de acuerdo?
MVC: Sí, es la situación más difícil que ha vivido la Corte históricamente. Pero creo que no se debe generalizar. Aquí hay Magistrados que trabajan muchas horas con mucha seriedad y compromiso que buscan la mejor respuesta a las controversias que se presentan, no sólo en demandas de inconstitucionalidad sino en tutelas; todo para el reconocimiento y materialización de los Derechos Fundamentales. Entonces, es la crisis más importante que ha tenido la Corte pero que no tiene que ver con los nueve Magistrados. La crisis, de nuevo, se limita a una denuncia relacionada con uno de los Magistrados quien presuntamente incurrió en una conducta delictiva. Si incurrió o no, no me corresponde a mí sino a los canales institucionales quienes determinaran la verdad.
AD: En concreto, ¿qué se ha hecho para salir de la crisis?
MVC: Primero, exponer los criterios de selección de las tutelas que ha seguido la Corte desde la sentencia del doctor Vladimiro Naranjo. Segundo, trabajar en criterios de selección más rigurosos y severos. Tercero, explicarle a la gente cómo se seleccionan las tutelas y dar cuenta que sólo el 2% de las seleccionadas son tutelas en las que median intereses económicos. La mayoría de las tutelas que se seleccionan son sobre personas de protección reforzada, madres y padres cabeza de familia, personas en condición de discapacidad, grupos étnicos, etc. Cuarto, se está buscando una reforma al reglamento interno de la Corte que garantice la transparencia. Todas estas medidas pretenden mostrar el trabajo de la corte al ciudadano.
AD: Frente al comunicado de prensa y los puntos que acaba de mencionar, ¿podría contarnos cuáles serán los cambios en los criterios de selección de las tutelas?
MVC: Esa iniciativa es apenas un proyecto del cual yo debo pronunciar mi voto a favor o en contra. Por eso, no puedo responder esta pregunta. Sin embargo, lo que considero debe ser el criterio rector para la selección de una tutela es una vulneración evidente de un Derecho Fundamental. El proyecto será discutido en sala plena esta semana y la siguiente.
AD: Permítame salirme del contexto de la crisis…
MVC: Pero claro, La corte no es sólo crisis ni el expediente Pretelt. La gente olvida los logros de la Corte Constitucional en sus 23 años de historia.
AD: Una corriente del Derecho Constitucional, basado en el argumento de la objeción democrática, asevera que las cortes no están legitimadas para tomar decisiones de índole política que naturalmente le corresponden al legislador, ¿qué opinión le merece ese debate?
MVC: El congreso es un escenario de mayorías, la Corte busca desde una interpretación constitucional, la protección de minorías. Cuando en la discusión democrática se cierra una puerta a minorías, en la Corte se abre una ventana. Incluso autores tan importantes como Jeremy Waldron y Roberto Gargarella que se opone a la dictadura de los jueces y al juez creador de Derecho, consideran fundamental la tarea del juez constitucional en el reconocimiento de derechos cuando la puerta ha sido cerrada en la discusión democrática. La Corte es una de minorías y no de mayorías, por eso no tiene muchos simpatizantes.
AD: A propósito de la deliberación democrática en el congreso, se está discutiendo en estos momentos el proyecto de Acto Legislativo 021 de 2014 que pretende una reforma al equilibrio de poderes. ¿Cree usted que un acto legislativo evitará futuras crisis al interior de las altas cortes?
MVC: No es dado que me pronuncie sobre el acto legislativo 021 o ningún otro porque estos están sujetos a control constitucional y yo soy uno de los 9 que votará eventualmente a favor o en contra. Pero sí puedo decir que no se pase a emplear un mecanismo de respuesta que es más coyuntural que reflexivo. Todo lo que sea un cambio importante en un Estado Social de Derecho tiene que ser producto de deliberación en la academia, una reflexión seria. Nuestra constitución tiene muy pocos años y ha sido sujeto de muchos cambios. Las constituciones de los países más serios son muy estables. La constitución de Bonn tiene 22 enmiendas, la nuestra que apenas tiene 23 años tiene 38 enmiendas.
AD: Si bien es cierto que se han planteado objeciones al funcionamiento de la corte a partir de esta crisis, también lo es que muchas objeciones se han planteado desde antes. Abarcarlas todas en esta entrevista es imposible por lo que nos referiremos a una: La tutela contra sentencia judicial. Esta posibilidad no fue contemplada por el constituyente pero se ha construido jurisprudencialmente. Dicha posibilidad ha creado tensión entre varios órganos. ¿Qué opinión le merece la consagración de esta figura?
MVC: Como en otras preguntas, debo ser cauta a la hora de responder porque se analiza hoy la posibilidad de eliminar la tutela contra sentencia de cortes de cierre. Sin embargo, debo reconocer que la posibilidad de interponer una tutela frente a una sentencia ha creado tensión entre las cortes, los medios lo llaman choque de trenes. Debe tenerse en cuenta que la Corte Constitucional es órgano de cierre en Derechos Fundamentales lo que la faculta a conocer casos en los que incluso un juez pueda incurrir en su menoscabo. También considero que la figura da la posibilidad de entreteger jurisprudencia de las altas cortes. En ese sentido lo ha hecho la Corte Constitucional al retomar sentencias de la Corte Suprema de Justicia del año 1935. Pero todo en aras de la protección a una persona.
AD: De todas las sentencias en las que ha participado, ¿cuál es su sentencia favorita, la que más alegría le trae?
MVC: La sentencia C-577 de 2011 sobre la noción de familia y derechos de las parejas del mismo sexo. Con anterioridad, la Corte reconocía un compendio de derechos a las parejas del mismo sexo estrictamente ligadas con derechos patrimoniales pero desconocía la noción de familia. Además es una sentencia que tiene especial mérito pues su ponente, Gabriel Eduardo Mendoza Martelo, tiene una visión conservadora y comparte que las parejas del mismo sexo son familia. Considero importantes otras sentencias como la T-760 de 2008 y la C-141 de 2010 sobre la reelección, pero mi favorita es sin duda la C-577 de 2011.
AD: Se dice en la opinión pública que de esta Corte, juristas como tal sólo hay dos: Luis Guillermo Guerrero y usted. Que el resto de magistrados no se parecen a los de las cortes de antes. ¿Qué piensa al respecto?
MVC: La Cote es humana y los humanos cometemos muchos errores. Tendemos desde el 91 a idealizar a seres humanos, partiendo de los grandes juristas que ocuparon estos cargos como el Doctor Calos Gaviria y Ciro Angarita. Pero perdemos de vista que hay diferentes tipos de jueces que permiten una visión plural en la Corte, hay jueces filósofos, políticos e interdisciplinarios. Por eso no hay que pensar en que hay una sola manera de ser un buen Magistrado. El buen Magistrado puede ser la persona que, no siendo filósofo o humanista, tenga formación y coraje por ejemplo.
AD: Ya que menciona al gran jurista Carlos Gaviria, ¿qué opinión le merece su deceso?
MVC: Carlos Gaviria fue siempre mi asesor espiritual y lamento mucho que falte. Me sigue doliendo mucho. Además de ser uno de los grandes juristas y humanistas de este país, es un ser humano maravilloso. Éramos muy cercanos.
AD: Hay un video en youtube en el que aparece el doctor Carlos Gaviria hablando con Luis Carlos Restrepo, entonces comisionado de paz. En ese video Carlos Gaviria habla de la naturaleza del delito político en que considera que no es propiamente un crimen pues es circunstancial, es el hombre que fue vencido en armas y que de haber ganado gobernaría. De lo anterior y refiriéndose al proceso de paz, ¿Cree distante la visión del doctor Gaviria de la que comparte el grosso de la sociedad colombiana hoy?
MVC: De nuevo, debo guardar reserva sobre estos temas. Todo lo que concierne a la paz está sujeto a control constitucional por lo que no es debido hablar. Sin embargo, quiero contarles una reflexión que me dejó un libro llamado la Rendición de Cuentas de Jon Elster. El libro narra la historia de una nación que desplazó la democracia por una dictadura. Luego, cuando se instauró de nuevo la democracia, se quiso condenar a todos los responsables de la dictadura. Dicho sistema no duró y cayó en manos de una nueva dictadura. Cuando se llegó nuevamente a la democracia, se reconoció que el error de antes había sido el de aplicar una justicia sin paz. Entonces, cuando un pueblo le apuesta a la paz, tiene que hacer una real apuesta.
AD: Por último, ¿qué mensaje le dejaría a los estudiantes de los Andes y al ciudadano en general?
MVC: Considero que lo más importante es hacer un ejercicio de reflexión en estos tiempos difíciles. Los Andes se caracteriza por su tarea investigativa y por la formación reflexiva, más cerca a los argumentos que a los personajes. También que la Corte sigue ahí, sigue trabajando, no solo los Magistrados sino todo el andamiaje que la compone. Entonces, que sea bienvenida la crítica, pero reflexiva.